Nota: 5
Dirección: David Slade.
País: USA. | Año: 2007. | Duración: 113 min.
Género: Terror, thriller.
Interpretación: Josh Hartnett (Eben Oleson), Melissa George (Stella Oleson), Danny Huston (Marlow), Ben Foster (el extraño), Mark Boone Junior (Beau Brower), Mark Rendall (Jake Oleson), Manu Bennett (Billy Kitka), Megan Franich (Iris).
Guión: Steve Niles, Stuart Beattie y Brian Nelson; basado en la novela gráfica "30 días de noche" de Steve Niles y Ben Templesmith.
En general no ha es una película para pasar a la historia, aunque tampoco es tan mala.
Para los apasionados al género, les aviso que no es tan buena como la pintan en el trailer.
Ya he hablado de esta película, antes de haberla visto, y en tenéis entradas en las que colgué los vídeos de fragmentos de película que pusieron en Quinto Milenio, y el trailer.
HISTORIA
La historia se resume en el título, 30 días de oscuridad.
La oscuridad de un mes entero se adueña de un pueblo del polo norte. Y las criaturas vampíricas se disponen a pegarse un atracón. Para ello estropearan todos los aparatos eléctricos, medios de transporte y perros de nieve.
Las personas intentan sobrevivir como pueden, escondidas en casas, y jugando con sus movimientos y los de los vampiros, que, por supuesto, son más rápidos, más listos y con más fuerza. En resumidas cuentas, es imposible enfrentarse a ellos. Además tenemos el aliciente de que cuando muerden a alguien, ese alguien se convierte en uno de ellos.
Un poco de tensión, mucha sangre, y quizá demasiado dramatismo en muchas escenas, la convierten en una película un tanto pesada, y lenta. A su favor diré que consiguen transmitir cierto agobio y tensión al espectador, pero nada grave para lo que podría haber sido.
CARACTERIZACIÓN Y MAQUILLAJES
Yo siempre pensé que los vampiros eran seres elegantes, nocturnos, oscuros... en esta película podemos ver que son además muy guarros. Van todo el tiempo llenos de sangre, sucios... vamos, que se asemejan más a unos despiadados zombies, que al típico y esperado Conde Drácula.
Bueno, en este aspecto, podéis observar que no estoy todo lo satisfecha que se podría estar... Ciertamente deja que desear. No en cambio el maquillaje, que me parece muy bueno, aunque no es el acertado. Me explico.
El maquillaje sería bueno, para un ser como un licántropo, que son más animal que humano. Pero para un “señor de la noche” no me convence...
Además, la agresividad de estos seres, me resulta obsesiva, yo me los esperaba más depurados, más interesantes... pero en la película se convierten en bestias devoradoras y asesinas despiadadas, pero muy astutas, eso no se pierde.
Uno de los maquillajes que más me ha gustado, es el que dan en los ojos, tornándolos enteros de negro. Y una de las mejores caracterizaciones y maquillajes es la de la vampira que parece ser la novia del jefe.
El resto de personajes no tienen un maquillaje de mayor relevancia, y las caracterizaciones son muy típicas de película de miedo: chico y chica, guapos y jóvenes, enfadados, que en situación extrema se percatan de lo mucho que se quieren...
ESCENOGRAFÍA
Me ha gustado algunos rasgos de la escenografía, como el juego con la nieve y las tormentas de nieve, o el escenario principal, ese pueblecito atrapado en medio de la nada. Me resultó interesante las imágenes aéreas, aunque la fotografía de la película, en general, no es de destacar. Es muy común, con planos no muy buscados ni complicados, y muy predecibles.
Y creo que no tiene mucho más interesante la escenografía por comentar, ya que en realidad, no se llega a comprender ni el espacio, ni los recorridos del pueblo, dejando la mayor parte del tiempo al espectador al margen de la acción (algo que me resulta un error grave en una película de estas características).
Es decir, no incluye en la escena elementos singulares que nos permitan identificar dónde estamos y a dónde vamos, y obligarnos a pensar cómo será el movimiento de los actores, cuanta distancia deben recorrer para salvar su vida, y de esa forma agobiarnos pensando en cómo lo harán, transmitiéndonos la tensión de la escena. Creo que esto es algo fundamental en una película de terror, y en esta película lo han dejado en el tintero.
Me ha gustado algunos rasgos de la escenografía, como el juego con la nieve y las tormentas de nieve, o el escenario principal, ese pueblecito atrapado en medio de la nada. Me resultó interesante las imágenes aéreas, aunque la fotografía de la película, en general, no es de destacar. Es muy común, con planos no muy buscados ni complicados, y muy predecibles.
Y creo que no tiene mucho más interesante la escenografía por comentar, ya que en realidad, no se llega a comprender ni el espacio, ni los recorridos del pueblo, dejando la mayor parte del tiempo al espectador al margen de la acción (algo que me resulta un error grave en una película de estas características).
Es decir, no incluye en la escena elementos singulares que nos permitan identificar dónde estamos y a dónde vamos, y obligarnos a pensar cómo será el movimiento de los actores, cuanta distancia deben recorrer para salvar su vida, y de esa forma agobiarnos pensando en cómo lo harán, transmitiéndonos la tensión de la escena. Creo que esto es algo fundamental en una película de terror, y en esta película lo han dejado en el tintero.
Leí la historieta original y bueh, no es una mala adaptación; aunque el concepto prometía más que el resultado.
ResponderEliminargracias gonxalo por tus comentarios. Sí que he leido la historia gráfica original, por eso la película tambien me decepcionó así. Podrían haber sacado más partido.
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